Tragedia elevada a arte
B. Antón/ Castrillo - miércoles, 07 de agosto de 2013
Los vecinos de Castrillo de la Reina representan durante este fin de semana la obra Los Siete Infantes de Lara con una puesta en escena sublime, digna de las mejores compañías
Mantenida durante los últimos once siglos gracias a las palabras, la tragedia de los Siete Infantes de Lara vuelve durante estos días a recobrar protagonismo a través de la representación que los vecinos de Castrillo de la Reina hacen del texto El bastardo Mudarra, de Lope de Vega. Una escenificación, convertida ya en un referente dentro de la escena burgalesa, que alcanzará este verano su XXII edición y que crece en el tiempo y sobre el escenario, en el que los actores, ninguno de ellos profesionales, elevan esta trágica historia a arte.
Abilio Abad Izquierdo no se cansa de perfeccionar e innovar en esta obra que lleva dirigiendo desde su nacimiento. Año tras año incorpora pequeñas novedades e incluso asegura que quiénes la vieron durante las primeras ediciones, no la reconocerían en las últimas. El año pasado sorprendió con la inclusión de un solo en directo de una voz femenina en uno de los momentos cumbres de la representación y este año ha estado trabajando por ofrecer un final más sorprendente. «Siempre he pensado en cómo poder mejorar esa parte y creo que lo hemos conseguido. Queremos llamar la atención y conseguir que ese final sea algo bello y espectacular», explica el director, que afirma que respecto a esta edición con las anteriores se ha mejorado en el escenario, que se ha cambiado, y en elementos técnicos dentro de área de la iluminación.
Cada año, desde hace más de dos décadas, 1.200 personas, 400 por pase, disfrutan de este espectáculo. No hay fórmula mágica para este éxito, ya que según su director se encuentra en el esfuerzo de sus actores y en el magnífico texto de Lope de Vega titulado El Bastardo Mudarra. «Es posiblemente lo mejor de este autor, y respecto a los intérpretes he tenido mucha suerte porque son gente que se deja la piel. Creo que he conseguido que estos actores se sientan dioses por un momento, aunque a veces pienso que no son conscientes del valor que tiene lo que hacen, de la belleza, efímera sí, pero bella que están pariendo. Lo mismo que los técnicos, los que preparan el escenario o los que se encargan del vestuario. Sin olvidar, por supuesto, a nuestro particular mecenas», señala Abad.
Uno de los hándicap que supera con creces la escenificación de esta obra es hacer entendible la representación de una historia en castellano antiguo. «Los actores hacen un papel magistral, con una perfecta vocalización y una dicción con sentido del texto. Y lo que es más difícil, también bordan la expresión corporal y los movimientos en las tablas», señala Abad, que sólo tiene buenas palabras para sus compañeros en esta aventura, que ya va a cumplir 22 años, por lo que el Ayuntamiento ha pedido a la Junta la declaración para esta representación de Bien de Interés Turístico y Regional.
Durante la representación hay algunos instantes sublimes, muy emotivos y difíciles de escenificar, como cuando Gonzalo Gustios, todavía prisionero en Córdoba, recibe el arcón con las cabezas de sus hijos a los que va identificando uno a uno o cuando Mudarra conoce la verdad de su vida y llega hasta Salas para encontrarse con su padre, un Gonzalo Gustios ya ciego después de llorar tanto la muerte de sus hijos. Aunque sin duda, uno de los grandes momentos a lo largo de las casi dos horas de representación es cuando Mudarra venga en su tiastro Ruy Velázquez la muerte de sus hermanos
Esta emotiva representación de una de las historias más apasionadas de la épica medieval española podrá verse en tres pases durante este fin de semana, desde el viernes hasta el domingo, a las 22 horas, en el atrio de la iglesia de Castrillo. Los interesados pueden reservar su entrada en el teléfono 676 356 766 o adquirirla en taquilla en el Ayuntamiento en horario de 18 a 21 horas los días de la representación, 9, 10 y 11 de este mes. Desde su inicio, ya la han visto más de 53.000 espectadores. El Ayuntamiento de Castrillo de la Reina colabora con la representación haciéndose cargo de la responsabilidad civil, de la recepción de autoridades y de la publicidad.